Injusto y caro
El caso Muñeca Bielorrusa más que un problema aislado, muestra por qué Chile no puede darse el lujo de tener instituciones capturables o permeables a intereses indebidos. Cuando los estándares se vuelven opacos o discrecionales, la economía deja de operar sobre reglas y empieza a operar sobre relaciones.
Macarena Vargas